La cofradía de La Dolorosa de Villalpando cumple medio siglo de existencia

La cofradía de la Virgen Dolorosa se ha reunido para celebrar medio siglo de existencia y homenajear a sus cuatro fundadores, tres de ellos ya fallecidos. La jornada discurrió con el rezo de las vísperas en la iglesia de San Nicolás de Bari y la procesión solemne con una de las tallas más hermosas de la Pasión terracampina, una piedad salida de la escuela vallisoletana de Juan de Juni.

La cofradía, que cuenta aproximadamente con un centenar de hermanos, está especialmente vincualada a la Semana Santa, pero todos los últimos fines de semana de agosto celebra, aprovechando la presencia de quienes regrean al pueblo en verano, un acto de hermandad que, en este caso, estaba más que justificado por su cincuenta aniversario.

En las celebraciones han participado la cofradía de Nuestra Madre de las Angustias de El Perdigón, la cofradía de Nuestra Madre de Villaralbo y la cofradía de Jesús Nazareno Vulgo Congregación de Zamora. De Villalpando han participado la cofradía de la Santa Veracruz y Jesús Nazareno, la cofradía del Santísimo Cristo de la Pasión y Hermanos del Trabajo, la cofradía del Santo Entierro, la cofradía de la Soledad y la cofradía de la Virgen del Carmen.

Los actos se completaron con la entrega de premios del certamen de dibujos, una misa por los difuntos y una comida de hermandad. Tal y como reconoce su presidenta, hija de uno de los fundadores, en la cofradía "hay una fe real, que se ha ido transmitiendo de padres a hijos porque es muy familiar".

En este contexto, la cofradía ha aprovechado para despedir al que hasta la fecha ha venido siendo párroco de la localidad, Javier Fresno, también muy vinculado al mundo de la religiosidad popular. A partir de septiembre, Fresno asumirá otro destino pastoral incorporándose al arciprestazgo del Vino.