12/02/2024
La iglesia de Zamora presente en el Congreso sobre la formación permanente en Roma
Del 6 al 10 de febrero ha tenido lugar en Roma el Congreso Internacional para la Formación permanente de los Sacerdotes que ha organizado el Dicasterio para el Clero, en colaboración con el Dicasterio para la Evangelización y el Dicasterio para las Iglesias Orientales. Una formación en la que ha habido representación de la iglesia de Zamora con la asistencia del sacerdote, Florentino Pérez, quien ha querido compartir su experiencia en estas jornadas que han congregado a más de 800 presbíteros de 60 países diferentes.
Renovarse o morir
El ser humano siempre está en construcción. Si estas expresiones las hemos escuchado hace ya muchos años y hemos reconocido la verdad que contienen para todos, hoy se transforman para los curas en una responsabilidad pastoral en medio de un cambio de época. Con esta inquietud el Dicasterio para el Clero ha convocado en Roma un congreso internacional para la formación permanente de los sacerdotes, durante los días 6 al 10 de febrero de 2024. El punto de partida fueron las respuestas recibidas a un cuestionario enviado a las Conferencias Episcopales, además de las orientaciones sobre la formación permanente ofrecidas en la Ratio Fundamentalis Institutionis Sacerdotalis.
Casi un millar de personas procedentes de todas partes del mundo se han dado cita en este encuentro. Un número importante de participantes son sacerdotes (diocesanos y religiosos), pero también es muy significativa la presencia de mujeres en este encuentro (laicas y consagradas). Todos ellos tienen en común su compromiso con la formación de los sacerdotes en las diferentes Iglesias locales donde viven. Así pues, se trata de una experiencia de la universalidad de la Iglesia de primer orden, donde personas muy diversas y procedentes de situaciones muy distintas, comparten su fe y su pasión por la vocación sacerdotal en la Iglesia.
El propio método del congreso ya quiere marcar un estilo de trabajo en la formación permanente de los sacerdotes. Lo primero que se puede destacar de él es que convierte este encuentro en un acontecimiento espiritual. La escucha constante del Espíritu Santo -personal y comunitariamente- en los momentos de oración, después de las diferentes intervenciones, en los grupos de trabajo, etc., forma parte del ritmo habitual del congreso. Juntamente a esto, otro puntal del congreso son los distintos tiempos para escuchar al hermano. Y juntos, en comunidad, desde la escucha al Espíritu y al hermano, se llega a la formulación de criterios y propuestas para seguir caminando desde lo que Dios nos pide como Iglesia.
Por tanto, el contenido del congreso no sólo han sido unas cuantas charlas, sino que también se han ofrecido espacios de oración y silencio, se han compartido experiencias reales como buenas prácticas que funcionan en lugares muy diferentes del mundo, se ha llevado a cabo un encuentro con el Papa y se ha realizado un trabajo rico en grupos de un máximo de 7 personas con una misma lengua en común, desde el método sinodal de "la escucha en el Espíritu". En cuanto al contenido, se han abordado las dimensiones humana, espiritual, intelectual y pastoral de la formación continua de los sacerdotes desde tres adjetivos: integral, comunitaria y misionera. El objetivo a partir de ahora será aterrizar en cada realidad diocesana lo vivido en este congreso, de modo que los sacerdotes de todo el mundo, siendo acompañados, cuidados y queridos, reaviven el don de Dios que hay en ellos. Florentino Pérez
El Congreso
El Congreso se inició con la celebración de una misa presidida por el cardenal Parolín, secretario de Estado. Las primeras intervenciones estuvieron a cargo del cardenal Bustillo, obispo de Ajaccio, en Francia, que habló sobre “Sacerdotes en el cambio de época”, y del Mons. Severino Dianich, teólogo italiano, cuya intervención se centró en el tema, “identidad y ministerios de los sacerdotes en una Iglesia sinodal y misionera».
Los días siguientes se contó, entre otras, con las ponencias del cardenal Gianfranco Ravasi; la psicóloga Chiara D´Urbano; el padre Hans Zollner, S.J. director del instituto de antropología IADC en la Universidad Gregoriana; y el obispo de Petrópolis, en Brasil, D. Joel Portella.
Uno de los momentos más especiales del Congreso fue la audiencia con el Santo Padre, en la que estuvieron presentes todos los participantes en este encuentro. El papa Francisco, al hablar del fundamento de la formación permanente, señaló que «solo si somos y permanecemos discípulos, podremos llegar a ser ministros de Dios y misioneros de su Reino”. En otro momento, el Pontífice advirtió que “cuando la mundanidad entra en el corazón del sacerdote, se arruina todo”, y reclamó sacerdotes «plenamente humanos, que sean capaces de jugar con los niños y de acariciar a los ancianos «
El Congreso terminó con una misa en la basílica de San Pedro presidida por el cardenal Lazzaro You Hueng, prefecto del Dicasterio para el Clero.