14/07/2023
Evangelización en tiempo de verano
Ante diversas circunstancias y dificultades tres parroquias de Zamora, San Lorenzo, San Lázaro y San José Obrero han dado un paso al frente para iniciar un nuevo proyecto pastoral en común en nuestra diócesis de Zamora. La organización de un campamento de verano en las instalaciones de Caritas en el lago de Sanabria. Ha sido todo un éxito, y no únicamente porque los destinatarios (chicos y chicas de las tres parroquias entre los 9 y los 12 años) lo hayan pasado muy bien sino por el ambiente que se ha respirado durante todo el tiempo (1 al 9 de julio) y sobre todo por la participación al 100% de las familias. Destaco esto último porque este proyecto no tiene como objetivo la formación cristiana de los chicos sino también el acompañamiento a los padres. que se sientan acogidos e integrados, que disfruten con sus hijos de una jornada de convivencia, que valoren el esfuerzo de estas tres parroquias…. Es una siembra de evangelio fundamental. El domingo día 9 a las 10.30 de la mañana les recibimos con los brazos abiertos. Había emoción porque la información a los padres se realizaba a través de las redes; no tenía móvil y solo pudieron hablar con ellos un momentito en un día con los teléfonos de los responsables. A las 11.00 Eucaristía presidida por Cesar y preparada por los chicos y los monitores. Después de un tiempo de esparcimiento, comida comunitaria y compartida; finalmente la sobremesa, donde los acampados mostraron sus destrezas teatrales. Unas 120 personas bajo la sombra de la carpa y los árboles. Sin prisa, con alegría y buen humor. Momento feliz según han expresado los padres en infinitos mensajes.
Además, este proyecto tiene la pretensión de continuar en el tiempo. Es decir, no se trata de unos días aislados de verano, sino que lo que se pretende es realizar una serie de actividades y momentos de encuentro durante todo el año para dar vida a las parroquias, para construir iglesia en salida, para crecer juntos en la fe.
Hoy pastoralmente hay que tenerlo claro. Ser honestos y coherentes: Toda actividad pastoral del tipo que sea, sin la implicación efectiva y afectiva de las familias es letra muerta.
En el campamento hemos rezado todos los días en la mañana y en la noche, hemos trabajado los valores del reino de Dios a través de Los superhéroes (la justicia, la amistad, la igualdad hombre y mujer, la paz…), hemos celebrado el sacramento del perdón y la eucaristía. Todo esto no tiene sentido si se queda en el aire. Y lo mejor de todo, es el sentido educativo y evangelizador que hemos querido darle al campamento. Acompañar y educar en el servir, en ser ordenados y diligentes, educados en las comidas (que por cierto el equipo de cocina encabezado por Floren ha sido excepcional). Los juegos, las dinámicas, los talleres se han realizado como se hace también en este tipo de actividades, cuidando la armonía pedagógica para integrar el evangelio y la vida. Por último, quiero destacar el trabajo compartido entre los sacerdotes. Muchas reuniones y sentido del trabajo en común. Sin olvidar a los monitores conjugando veterinaria e inexperiencia. Entre todos, iremos caminando, creciendo para seguir apostando por los jóvenes y sus familias.