San Esteban Protomártir, primer testigo de Cristo

En el marco de la Octava de Navidad, la Iglesia celebra hoy, 26 de diciembre, la memoria de San Esteban Protomártir, el primero que dio su vida por confesar a Jesucristo. Su conmemoración, inmediatamente posterior a la solemnidad del Nacimiento del Señor, subraya la estrecha unión entre el misterio de la Encarnación y el testimonio fiel del Evangelio, incluso hasta la entrega total.

Elegido entre los primeros diáconos de la Iglesia, San Esteban destacó por su servicio a la comunidad y por la valentía de su anuncio. Lleno del Espíritu Santo, proclamó a Cristo con claridad y coherencia, aceptando el martirio como culminación de una vida entregada a la fe. Sus últimas palabras, marcadas por la confianza en Dios y el perdón hacia sus perseguidores, lo convierten en un referente permanente para la Iglesia de todos los tiempos.

La devoción a San Esteban se encuentra profundamente arraigada en la diócesis de Zamora, como ponen de manifiesto los numerosos templos y parroquias que lo tienen como titular, tanto en la capital como en distintas localidades del ámbito rural. Iglesias y comunidades dedicadas al santo en lugares como Zamora, Fuentelcarnero, Moral de Sayago, Viñas de Aliste o Madridanos son expresión viva de una veneración mantenida a lo largo de los siglos y transmitida de generación en generación.

En esta jornada litúrgica, la Iglesia diocesana contempla en San Esteban un modelo de fe firme, de servicio generoso y de fidelidad al Evangelio. Su testimonio invita a vivir la Navidad como un compromiso renovado de seguimiento de Cristo y de entrega a los hermanos desde la caridad y la esperanza.